Anuario 2024 - 2025

COLEGIO STO. TOMÁS DE VILLANUEVA | agustinosvalencia.com 92 L a inclusión en el ámbi- to educati- vo es un principio fundamental que busca garantizar el derecho de todos los estudiantes a aprender en condiciones de igualdad, inde- pendientemente de sus características personales, cul- turales o neurológicas. Cuando hablamos de inclusión, hablamos de todas las personas que forman parte de la comunidad educativa: docen- tes, personal de apoyo, directivos, familias y, por supuesto, el alumnado. Todos tenemos un papel fundamental y sin la par- ticipación de todos, la inclusión se convierte en ciencia ficción. Desde los valores agustinianos, donde el amor, la interioridad y la búsqueda de la verdad forman parte de nuestra esencia, la inclusión se convierte en un acto de justicia. En los colegios, la inclusión es de vital importancia y es aquí donde nuestros hijos e hijas además de apren- der matemáticas, lengua… también es importante que aprendan empatía, respeto y convivencia. Así, si desde pequeños crecen en un entorno donde todos son valora- dos, donde la diversidad es un hecho que no se oculta, estaremos formando generaciones más justas, más so- lidarias y humanas. Sin embargo, la realidad es que en el día a día apare- cen conflictos y algunos plantean dificultades a la hora de abordarlos porque se desconoce la raíz del problema, esto conduce a una falta de consenso al intentar buscar una solución, dentro de la comunidad educativa. Síndromes como el trastorno del espectro autista (TEA), el trastorno por déficit de atención e hiperactivi- dad (TDAH), el síndrome de Tourette, entre otros, no siempre se manifiestan de forma visible o fácilmen- te identificable. En muchas ocasiones, sus signos se interpretan erróneamente como mala conducta, falta de habilidades sociales, desobediencia o falta de interés, lo que nos puede llevar a respuestas inadecuadas dentro de la comunidad educati- va. Esta falta de comprensión puede generar exclusión dentro del aula, aislamiento social del alumno y una experiencia educativa ne- gativa tanto para los estudiantes, profeso- res y padres. Aunque con algunos de estos t r a s t o r n o s e s t a m o s más fami- liarizados porque co- nocemos casos cercanos o incluso aparecen en medios de comunicación en forma de series o películas, todavía necesitamos profundizar más y conocer en qué grado puede afectar al día a día, pero el síndrome de Tourette nos resulta más desconocido. El síndrome de Tourette es un trastorno neurológico que se manifiesta principalmente a través de tics motores y vo- cales que son involuntarios. Estos pueden incluir desde par- padeos, movimientos repetitivos o sonidos, hasta expresio- nes verbales complejas que, en algunos casos, pueden ser malinterpretadas como groserías o conductas disruptivas. La falta de información es una de las principales barre- ras para la inclusión verdadera. Cuando un adolescente ob- serva que un compañero tiene estallidos de ira, repite ges- tos, utiliza palabras fuera de contexto o se aísla socialmente, puede sentirse confundido, molesto y ambas partes acabar heridas emocionalmente. Desde las tutorías con ayuda de la información aportada por la familia, se tratan las diferentes situaciones en colaboración con medios externos y en coor- dinación con el departamento de orientación. Se fomentan los espacios de dialogo, de reflexión y de educación emo- cional a través de actividades. Se busca la comprensión, la empatía con su compañero, que perciban que este compor- tamiento “extraño” no es un ataque personal o mala edu- cación, sino que a veces es más complejo y forma parte de una realidad interna que no puede controlar del todo. No se trata de justificar cualquier comportamiento, sino de com- prenderlo en su contexto. El síndrome de Tourette es solo un ejemplo. Existen mu- chas condiciones que afectan a la conducta o a la forma de aprender y que requieren un enfoque comprensivo, no san- cionador. La inclusión no es un favor, ni una carga, ni una excepción. Es una forma de entender la educación como de- recho y como oportunidad. “La medida del amor es amar sin medida.” – San Agustín La inclusión, en este sentido, es un acto de amor edu- cativo que beneficia a todos, no solo a quienes más lo ne- cesitan. Porque cuando se educa desde la empatía, toda la comunidad crece. Desde el colegio agradecemos a Belén Beltrán, a la Asociación de la Comunitat Valenciana de Síndrome de Tourette y Trastornos Asociados (ACOVASTTA), la infor- mación aportada a todo el profesorado y por abrirnos los ojos a otra realidad. Martín Fuertes,Teresa Coordinador convivencia 1º ciclo Comprender para Incluir: El desafío de la inclusión informada en el entorno escolar

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